MADAME LYNCH

Mujer calumniada y alabada al mismo tiempo, Elisa Alicia Lynch nació en el condado irlandés de Cork. Perteneciente a una familia aristocrática, se casó, por arreglo de su familia, con el médico del ejército inglés, coronel Qatrefages quien la llevó a vivir a Argelia. No soportó más de dos años esta vida en el Sahara que la joven esposa de 17 años abandonó a su marido y fue a vivir a París. En 1854 conoció en esta ciudad al diplomático paraguayo General Francisco Solano López. Ambos iniciaron en Francia un romance que culminaría recién con la muerte de Solano López en 1870. Divorciada oficialmente, la Lynch se vino al Paraguay con Solano López, naciendo en su viaje (En Buenos Aires) su primer hijo Francisco (Panchito López). Recién pudo salir a la vida pública en el Paraguay tras la muerte de Don Carlos, en 1862. Acompañó a Francisco Solano durante toda la guerra, por lo que se le acusó de numerosos crímenes cometidos por ella en el transcurso de la misma. Llegó a Cerro Corá y se salvó de ser asesinada debido a su ciudadanía inglesa. Sepultó con sus propias manos a Francisco Solano y a su hijo Panchito. Abandonó el Paraguay y fue a vivir a Francia. Intentó volver al Paraguay pero ya fue mirada con odios y rencores. Murió y fue sepultada en Francia. Posteriormente sus restos fueron traídos al Paraguay y hoy reposan en el cementerio de la Recoleta en Asunción.